Revista Globo Rural
13/01/2017
El volumen alcanzó las 6,9 millones de toneladas, el año en que Brasil tuvo su cosecha record de 6,7 millones de toneladas
Las Importaciones brasileñas de trigo crecieron 33% el año pasado y alcanzaron 6,86 millones/ton. Los gastos con la entrada del cereal extranjero aumentaron 10% para (US$ 1.335 millones). Las importaciones fueron favorecidas por la baja de 17% en el precio del cereal por debajo del promedio a US$ 194 la tonelada, en 2015 registraba US$ 235 la tonelada. El mayor promedio histórico fue registrado en 2013 cuando alcanzó US$ 332 por tonelada.
Las estadísticas del Mdic muestran que el año pasado las importaciones de trigo de los Estados Unidos crecieron 171% para 1,266 millones de toneladas, alza de 128% para US$ 240 millones en el valor importado. Los norteamericanos vuelven a a ser el segundo mayor proveedor de trigo para el mercado brasileño dejando detrás a Paraguay, que también aumentó 68% sus ventas para Brasil para 956 mil toneladas (US$ 176,9 millones).
Argentina se mantiene como principal proveedor de los molinos brasileños. Las importaciones el año pasado sumaron 3,95 millones de toneladas – US$ 772,4 millones. Los molinos también compraron más trigo en Uruguay. El volumen de trigo uruguayo sumó 577.000 toneladas y los gastos alcanzaron US$ 111,7 millones.
La importación brasileña de trigo alcanzó el mayor volumen de los últimos cuatro años, justo cuando la producción nacional llegó al record de 6,726 millones/ton, 21,5% arriba de las 5,534 millones de toneladas cosechadas el año anterior. Según datos divulgados el último martes por la Copañía Nacional de Abastecimiento Conab, la oferta equivale a 62,7% de la demanda brasileña y 64,7% del volumen esperado por la molienda industrial en ese periodo.
La Conab proyecta un superavit cercano a 1 millón de toneladas en la oferta de trigo en Rio Grande del Sur, considerando la producción estadual de 2,49 millones de toneladas y la capacidad industrial de molienda estimada por Abitrigo de 1,4 millones de toneladas, incluyendo trigo importado. Los técnicos destacan que ese superavit exigió la intervención del gobierno federal para transportar el exceso de productos para las regiones Norte y Noreste.
En las 4 subastas públicas realizadas desde el mes pasado por la Conab, se ofreció apoyo para transporte de 1,330 millones de toneladas de trigo y hubo demanda para 515.580 toneladas, básicamente por medio del Premio de Ecualización del Precio al Productor (Pepro). Los técnicos de Conab observan qué porción del volumen excedente, con menor calidad, será demandado por la industria de ración para substituir al maíz. Ellos comentan que la alternativa de adquisición por el Gobierno Federal de parte de la producción excedente, para recomponer los stocks públicos, está siendo negociada por el Gobierno.